MIS PALABRAS PARA MI HERMANA

 Ya casi es la boda de mi hermana, ella quien supo esperar por ese su día, que gran día, uno de tantos que vivió entre hilos tejidos, tijeras, agujas, pinceles, colores y cada cosa que con sus manos quiso hacer. La radio siempre al lado y los sobrinos que absolutamente todos encontraron en ella cobijo con canciones de cuna, lecturas,  historias y revistas muy interesantes. Siempre con su tranquilidad y perseverancia sus estudios alcanzó de Bachiller se graduó. Entre cursos y talleres un oficio, alcanzo ser ejemplo a la familia de cordura y amor. Con la ayuda de Cristo la libertad consiguió y conocer lugares inició, cosa fácil no ha sido, imposible tampoco solo con fe se puede lograr. Meina, así le dicen los pequeños, Came entre sus hermanos con cariño, la llaman Carmen porque sus padres lo quisieron. Hija de Lucia Urbina y Melecio Matos,  sus hermanos Cláudio, Edison, Nilson, Pedro, Vivian, Noemi, Ingri, Omelia y Mileivi hoy te felicitan y la bendición te dan, para que bien te vaya en tu vida y tu andar.

Al enterarse la gente decían para que se va casar, si ella ¿que edad tiene? ¿a su mama quien la cuidará?, ¿quien es esa persona? con quien se casará? Debe tener casa y carro, sino que no se case; que donde vivirá ? en La Fundación o en Chirimena, ¡ay Dios mio! Y mis hijos quien los cuidará?, con quien hablare en las noches y el agua quien la cogerá? La cena no sabrá igual y la puerta a las 8 00 pm quien la tocará? Buena hermana, buena hija incomparable su valor es una mujer virtuosa la que hoy emprende su camino en unión.  Creyó, se decepcionó y espero y al final Dios le concedió lo que tanto deseo. Ahora le toca a ese hombre valorar a tan noble mujer, ser honesto y delicado y de ella su sostén. Muchas cosas se dirían escritas en un papel, pero ¡no es lo que se diga! sino lo que esperamos ver.